¿Cómo repartir una casa heredada entre varios hermanos?
Cuando se recibe una herencia entre varios hermanos, es común que se incluya la casa familiar. La distribución de los bienes del fallecido puede ser un proceso complejo y a veces genera dudas y conflictos entre los herederos, especialmente sobre los inmuebles.
La vivienda familiar, así como el resto del patrimonio que integra la herencia, debe repartirse entre los herederos legales conforme a lo dispuesto en el Código Civil y lo indicado en el testamento.
Las propiedades inmobiliarias suelen tener un alto valor, por lo que generalmente no se asignan a un único heredero. En casos con varios hermanos, lo usual es que cada uno reciba una parte de la vivienda. ¿Pero cómo se lleva a cabo este reparto?
Reparto de una casa heredada entre varios hermanos
Para la distribución de viviendas y otros bienes, primero se debe considerar si hay testamento. Si existe, el reparto se hará conforme a lo que este estipule, siempre respetando los límites legales que garantizan la parte legítima a los herederos forzosos.
Si no hay testamento que indique cómo se debe repartir la herencia, cada hermano recibirá una parte de la vivienda.
Este reparto se hará proporcionalmente al número de herederos forzosos. Por ejemplo, si hay 2 hermanos, cada uno recibirá el 50%; si son tres, cada uno obtendrá el 33.33%, y así sucesivamente según el número de herederos.
De esta forma, cada parte se convierte en copropietario de la vivienda, siendo titular de una porción de la misma, conocida como proindiviso.
Otras alternativas
Cuando varios hermanos heredan la vivienda familiar, existen varias opciones. Por lo general, se requiere que los herederos lleguen a un acuerdo, aunque en algunos casos, como señala el Consejo General del Notariado, si un heredero se opone, los demás pueden obligarlo a vender la vivienda. Entre las alternativas se incluyen:
- Alquilar la vivienda y repartir las ganancias entre los hermanos.
- Vender la vivienda a un tercero.
- Que uno de los hermanos resida en la casa heredada por todos.
- Que uno de los hermanos compre la parte del resto, adquiriendo el 100% de la propiedad.
- Que uno de los herederos decida vender su parte proindiviso, generalmente a empresas o entidades.
