Cambios en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales

Cambios en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales: Lo que las pymes deben saber

Cambios importantes en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales afectarán a las pymes desde los 10 empleados.

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales, en vigor desde hace casi tres décadas, se encuentra en pleno proceso de revisión para adaptarse a un entorno laboral que ha cambiado radicalmente. El Ministerio de Trabajo ha presentado recientemente un borrador que introduce novedades significativas, con un enfoque más amplio e integrador en materia de salud laboral. Las pequeñas y medianas empresas (pymes) deberán prepararse para cumplir con nuevas exigencias que van más allá de la protección física en el lugar de trabajo.


Hacia una visión más integral de la prevención

El nuevo texto propone un enfoque ampliado que incorpora elementos como la salud mental, el impacto del cambio climático, la igualdad de género y la consideración de la edad en la evaluación de riesgos. Esto significa que los riesgos laborales ya no se medirán únicamente por factores físicos o mecánicos, sino también por aspectos psicosociales y ambientales. La vigilancia de la salud incluirá revisiones tanto físicas como mentales, realizadas de manera periódica y en momentos clave como el inicio de la relación laboral o tras una baja médica prolongada.

Además, se introduce de forma más clara el derecho a la desconexión digital, alineado con las leyes de control horario, lo que obligará a las empresas a revisar sus políticas internas y garantizar que los empleados puedan desconectar fuera del horario laboral.


Un nuevo marco de obligaciones para la pymes

Uno de los cambios más significativos afecta directamente a las pymes: se reducen los umbrales de plantilla a partir de los cuales el empresario puede asumir personalmente la gestión de la prevención. Hasta ahora, las empresas con hasta 25 trabajadores podían delegar estas funciones en el propio empresario. Con la nueva norma, ese límite baja a 10 empleados. A partir de esa cifra, será necesario contar con recursos especializados y designar responsables específicos para las tareas preventivas.

Este ajuste supone un reto para muchas pymes, que deberán asumir costes adicionales en formación, contratación de personal cualificado y adecuación de puestos de trabajo. También se establece la obligatoriedad de formar a los delegados de prevención y miembros del comité de seguridad y salud en función de las características específicas de cada sector.

 
Perspectiva de género, edad y discapacidad

Otro aspecto destacado del borrador es el reconocimiento explícito de que los riesgos laborales pueden afectar de forma diferente a hombres y mujeres, así como a personas de distintas edades. La norma también contempla medidas específicas para la reintegración de trabajadores con discapacidad permanente o que hayan atravesado enfermedades graves, promoviendo su adaptación al puesto.

Estas medidas pretenden garantizar una protección más eficaz y personalizada, al tiempo que fomentan una cultura preventiva más inclusiva y dinámica dentro de las organizaciones.

 

La modernización de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales persigue reforzar la salud y seguridad en el trabajo desde un enfoque más humano y transversal. No obstante, este avance legislativo llega acompañado de una carga adicional para las empresas, especialmente las pequeñas, que deberán encontrar el equilibrio entre cumplimiento normativo y sostenibilidad económica.

En nuestra asesoría en Asturias ayudamos a autónomos y pymes a adaptarse a los cambios legales que afectan al ámbito laboral. Si necesitas orientación sobre cómo aplicar esta nueva normativa, contacta con nosotros.